no

un momento


todo es turbio


nada es gracioso


no... qué está pasando


¡cómo llegué hasta aquí!


no se suponía que sería así, no...


no no no no


no...


no tengo control sobre las cosas
nada es bonito
todo es temporal
todo es rápido
¿y el amor?
ya no creo en nada
porque nada existe para mí


¿qué haré cuando me muera?
estar solo como ahora

antes... creía en un cielo

¿y si no hay cielo como ahora creo?
entonces qué demonios hago aquí

debo de moverme ya
ya
¡Ya!
o lloraré mucho

llevaré la vida hasta sus últimas consecuencias.

sin presión sobre el capuccino

no me comprendo
no comprendo lo que siento
no comprendo por qué lo que siento siempre cambia
no comprendo por qué lo que siento es tan fuerte e intenso
no comprendo cómo tomarme en serio teniendo sentimientos en cambio constante aunque sean fuertes e intensos
no comprendo los espacios
no comprendo el tiempo
no comprendo los recuerdos
no comprendo los sueños
no comprendo mis ojos
no comprendo a la gente
no comprendo el instante
no comprendo lo ficticio, la imaginación, ni lo real
no comprendo lo que existe
no comprendo la fe
no comprendo el dormir ni estar despierto
no comprendo el dolor
no comprendo el placer
no comprendo la textura
no comprendo los colores
no comprendo los sonidos
no comprendo las estrellas
no comprendo las cámaras fotográficas, ni los cd's
no comprendo los orgasmos
no comprendo mi cabeza
no comprendo el aire
no comprendo mis uñas
no comprendo dónde
no comprendo por qué el ser y no la nada, pero no importa
no comprendo por qué me importa
no comprendo por qué no me importa
no comprendo a los animales
no comprendo el lenguaje
no comprendo los sabores
no comprendo a las arañas
no comprendo mi piel
no comprendo la piel de esa otra persona, sus ojos, su cabeza ni sus uñas
no comprendo la luz
no comprendo la tinta
no comprendo la necesidad
no comprendo el arte
no comprendo el por qué
no comprendo el vacío del pecho ni el calor del pecho
no comprendo las profundidades
no comprendo el envejecimiento
no comprendo las alturas
no comprendo el sexo
no comprendo la ropa
no comprendo lo comestible, lo no comestible ni comer
no comprendo las distancias
no te comprendo
no comprendo las drogas
no comprendo la relación inocencia/putería
no comprendo los finales
no comprendo a los bebés
no comprendo la belleza
no comprendo tus orgasmos
no comprendo las lágrimas
no comprendo la desnudez
no comprendo los pensamientos
no comprendo los olores, benditos olores/malditos olores
no comprendo la escuela ni la educación
no comprendo la historia
no comprendo mi obseción/ mis obseciones
no comprendo el frío, me gusta el frío
no comprendo por qué me gusta el frío ni ninguna otra cosa
no comprendo la organización
Casi estoy seguro de que comprendo la música, al menos a veces, al menos un poco
no comprendo las fiestas
no comprendo una vagina, ni lo que se siente tener una. Tampoco comprendo el pene, ni entiendo lo que se siente tener uno
no comprendo el dinero
no comprendo el trabajo
no comprendo los embarazos
no comprendo a las plantas
no comprendo el crecimiento
no comprendo la muerte
no comprendo que las personas esperen que haya algo después de la muerte
no comprendo a las personas que afirman que no hay algo después de la muerte
no comprendo tus curvas
no comprendo mis manos
no comprendo la voz
no comprendo el periódico
no comprendo las computadoras
no comprendo la inteligencia ni la estupidez
no comprendo las sonrisas
no comprendo que las sonrisas reflejen felicidad
no comprendo la felicidad
a veces siento que comprendo a las nubes, pero es por cursi
no comprendo los lenguajes
no comprendo a la luna
no comprendo por qué puedo interpretar manchas de tinta en una hoja en blanco
no comprendo el mar
no comprendo las piedras
no comprendo los padres
no comprendo a la familia entera
no comprendo la burocracia
no comprendo la amistad
no comprendo la transmisión de datos en internet
Creo que comprendo el odio más que al amor, pero a ninguno de los dos los entiendo
no comprendo la pornografía
Me es comprensible la rebeldía, porque está encontra de cosas que nadie comprende
no comprendo cómo alguien puede tocar un instrumento musical y destrozarme
no comprendo el tener hijos
no comprendo a las moscas
no comprendo lo gracioso
no comprendo los refugios
no comprendo los rituales de apareamiento
no comprendo las ilusiones
no comprendo a Chabelo y todo lo que lo rodea
no comprendo la electricidad
no comprendo cómo el hombre ha logrado sobrevivir tanto tiempo siendo más pinche que virtuoso
no comprendo el orgullo
no comprendo que tú estés allá y yo acá, aunque estemos juntos
no comprendo dónde es allá y acá
no comprendo mis adentros
no comprendo las buenas ideas
no comprendo la popularidad
Trato de comprender la sutileza, porque me gusta, pero no he podido saber dónde empieza y acaba
no comprendo la suerte
no comprendo el olvido
no comprendo las carreras de ratas
no comprendo los asesinatos, aunque supongo que ni asesinos ni víctimas comprenden
no comprendo las armas
no comprendo las fronteras
no comprendo mis manías
no comprendo la lluvia
no comprendo la voluntad
no comprendo el ser adulto (¡¿Soy adulto?!, ¿y eso desde cuándo?, ¡Ni madres!, yo soy yo y ya)
no comprendo el honor
no comprendo los huracanes
no comprendo el buen gusto
no comprendo la vanidad
no comprendo por qué paso por Zara y me le quedo viendo a la ropa
no comprendo el chocolate
no comprendo la vergüenza
no comprendo los aviones
no comprendo los teléfonos
no comprendo los rascacielos
no comprendo el humo
no comprendo a dónde va todo cuando borro la papelera de reciclaje
no comprendo los calendarios
no comprendo las edades
no comprendo los límites
no comprendo la memoria
no comprendo la vida
no comprendo cómo un cuchillo, un carro a alta velocidad, una caída desde una distancia muy grande, una falla en el cuerpo, el tiempo, etc... pueden hacer que la vida se desvanezca y se pierda en la incomprensión
no comprendo las cicatrizes
no comprendo los traumas
no comprendo los rituales
no comprendo la virginidad
no comprendo la idea del infinito
no comprendo los Oxxos, ni súper 7's, ni a las personas que trabajan en ellos
no comprendo la importancia
no comprendo los instintos
no comprendo la briza marina
no comprendo a los ciegos
no comprendo el cielo
no comprendo la fortaleza
no comprendo la meditación
no comprendo los sentimientos de las demás personas, mucho menos los sentimientos de las personas que más me importan
no comprendo la debilidad
no comprendo los rezos
no comprendo a los robots
no comprendo a las femmes fatales
no comprendo el respirar
no comprendo por qué me gusta Virginie Ledoyen
no comprendo la resposabilidad
no comprendo tantas cosas
no comprendo no comprendo y no comprendo

Total, realmente no siento que comprenda cosa alguna.
No creo que llegue a comprender algún día.
Me siento tranquilo así.
Aunque eso asesina mi carrera filosófica bien y bonito, toma.

tears of joy scare ourselves

la vida llena de insomnio

miento, no es insomnio, sino la voluntad de estar despierto cada vez más tiempo
¡Cómo querer quedarse dormido en una noche tan bella como la de ayer!

había un poco de niebla, las luces de la ciudad se quedaban suspendidas en el aire por la nube caída
arriba una luna casi llena se paseaba por debajo de nubes que quisieron subir muy alto
una luz cobriza, luego plateada recorría los cúmulos, las onditas cubrían el cielo

no era el momento para parpadear
el frío despertaba mis sentidos
el cansansio embotaba cualquier pasión que pude haber sentido
ahí estaba ojiabierto y sin más voluntad que la de estar ahí

..--.---.-

¿cómo va el drama?

-mañana y pasado mañana-
entonces el viernes te digo

-si todo sale biem
compraré lsd el sábado. Oliver y yo nos tiraremos a una alberca.

-si todo sale mal
no soportaré llegar al sábado
habré perdido otra batalla contra el mundo y me sumergiré un poco más en la frustración resignada
que me perseguirá como demonio el resto de mi vida.

¿qué otra razón necesito para no dormir?

dormirdormir
zapato/guarache/tirado/enlacalle/desanagustín

en mi caso en la calle donde aparece mi primera víctima. un tal Nahum.

--.--.---.

hablando de víctimas

¿inyección, hachazo o navajazo?

hachazo: me recuerda mucho a crimen y castigo

navajazo: es muy difícil matar a alguien de tan solo un navajazo. Nahum es un hombre alto
y su asesino será una frágil dama.

inyección: una inyección rápida de heroína al cuello
que tenga una muerte con un malviaje mental incontrolable

--.---...--.-

si todo sale bien el viernes haré laberintos para la urraca

Oliver y yo hablaremos sobre todo, menos sobre Ella.
Así aparecerá su silueta solamente, una ausencia en el paisaje
más libertad

Yhbu

recuerdoz


ver hacia el cielo acostado en el fondo de una alberca

golpear a mi mejor amigo en el centro de una cancha de basket, de noche. Por un asunto de chicas

una cueva de arbustos en el kínder

a Claudia, y su voz entrecortada

tratar de sacar una bicicleta de un charco, y mancharme completo de aguas negras

en un campo de fut jugando con la tierra, indiferente del partido

el transporte escolar tan frío en las mañanas

Adriana entre los árboles

Mi padre corriendo y ganando

Tomás, Alejandro y yo escuchando las mentiras de Carlo, y respondiendo con mentiras también.

Ser el aguafiestas para Miguel Ángel, cuando molestaba a las niñas

El olor a cigarro en una tocada con nevulador, el color de mi guitarra

El sabor de las pilas

Melba sugerente, yo tímido

Escuchar las canciones entre las pausas de nuestro programa de radio

Entre los maceteros llorando

teatro, escondido, espiando

salir corriendo de la pista, desesperado, por no poder completar la prueba

Yo conteniendo con todas mis fuerzas a Yaicet, ella arañándome el pecho haciéndome daño, una
locura, muchos lamentos, mucho odio

Una mentira.

mañana de febrero corriendo al heb por preservativos

el cuarto de Gerardo

noche de insomnio en Chihuahua, sangre en la puerta, la buena suerte de Leslie, la mala suerte mía

piedra, su sensación en mis manos, mi cuerpo sudado

fumando mariguana con carlos, en su casa, escuchando a radiohead

fumando mariguana con caelitos, en su casa, jugando ajedrez, escuchando a madredeus

un sujeto vestido como yo, peinado como yo, pensando como yo, con una mochila como la mía, llamado Iván.

Caminatas por madero con Dionisio, hablando idiomas inventados

Los profesores del regio y mi trauma institucional

piernas peludas de la hermana de Pedro

ir tarde a la prepa en bicicleta

sí, subía árboles

hormigas en mi garganta

voyeurismo vecinal

Catemaco, un cuarto con dos camas para una persona. Agua fría y repelente selva.

la camisa de aquél café de playa

Muchos libros, una feria, un encuentro indeseado con Daniel, un regreso anticipado con Yaicet

Durango y la cafetería en medio de la nada

Sinister minister y mi hermano

Dos hombres planeando una traición que sería nuestro estigma y destrucción.

Acentos españoles y Alba

Dos treesomes, seis personas, un mes, una traición, y un correo con una pintura de Van Gogh

poema que nunca debió haberse escrito para ángela

noches de hedoné con bere, del df a monterrey

el comedor de la antigua sala de informática

triunvirato psicosexopasional

un inocente no beso para eliza

un nada inocente beso para ana soriana

cocaína y el café infinito

el maquillaje de carlos

dormir en el suelo de la escuela en la calle 44

mil planes frustrados para besar a misael

claudia, su embarazo, el café libélula, charo y su novio canadiense pudriéndose en ácido

un pedazo de madera en forma de carabina robotech

caoz, las historias, los dibujos

horas de claustrofobia en un túnel maya

majo majo majo, correr huyendo de majo, majo robándo atención demostrándose una genio,
majo robándome algo íntimo sin uso de fuerza

melba y su casa vacía

dos tres cuatro peleas

columpios y saltar con vuelo

cacho, edén y yo contra 5 personas y ganando

caminata hasta el quemado. Agua congelada. Manos inmóviles. Luz de luna iluminando el
camino.

Arrancar una flor con coraje, horas con ella en mano, arrojarla a las puertas de una casa, con un buen deseo marchito en odio

clase de latín, el profesor me pregunta y yo más alucinado que nunca

segunda noche con aire/arena/día/era y la impertinencia de ser sincero

momo

una promesa a los astros, y ellos cumpliendo su parte del trato

viejos vicios, muerte lenta

pezones pequeños, y la sensación de estar en el lugar equivocado

remar por la presa

los cabos, langosta, y saberse imbécil

lsd, úrsula, muchos gritos, dos policías.

abrazo en la oscuridad, Chío

caminatas en las noches entre plazas y calles

las ponencias perversas/ rezar con xaraí

sueños raros, y llamadas telefónicas nocturnas

manejar desesperadamente. No voy a llegar. Esto es inútil. Seguir manejando. Pasarse dos altos.
Claxón. Sudor. Soyosos. Dolor en el pecho. Llegar. Bajarse del auto. Buscarla. Buscarla. Buscarla. Ella en uniforme bajándose del autobús. Ella: ¿qué haces aquí?. Yo callado. Borrón de memoria. Ella subiéndose al autobús. Yo congelado. Enciendo el coche. Nada pasa. No hay nada. El coche enciende. Piso el acelerador. El carro gira sin control en una extrema bajada. Mi cabeza contra el volante. Ojos secos.

Discursos en la prepa

Ana Dulce

Vino tinto vodka y vino blanco, ver el futuro

despertarme con un libro en la cara

Clases a dos mujeres y un gnomo que es mi amigo

Una lancha, mangos, peces, un hotel rojo

Mamá diciendo las vocales

Imua lima lama

Congreso. Maquillaje de mimo. Una poesía con las manos. Maquillaje de mimo despintándose por
las lágrimas

Una prueba de embarazo negativa

Chuy haciendo cosas de chuy

Fuente ovejuna, héctor hablando por primera vez de sus años y sus muertes

4 testigos desconocidos

Rodolfo, pearl jam y mucha mariguana

las manías de la señorita Durazno frappé, sus cartas de hermandad mística

shh. Detrás de la ‘taquilla’ de la sala experimental del teatro de la ciudad

sonrisa incompleta, y la ninfomanía

un cuento sobre una rana que va al circo

serias pláticas con mayorga en las que hablé mucho y no dije nada

robo de amigos entre amigos

otra vez bere, más hedoné. Fotografías, prima demens

waiking life, un porche, Daniel pidiendo un permiso que me dejó perplejo por meses

orgasmos finjidos para mí, orgasmos finjidos para ti y todas tus amigas

el himno nacional estadounidense cantado desde una cama en algún lugar perdido del mundo

árboles hablando, árboles derritiéndose, yo convirtiéndome en piedra. Toda la fuerza de
voluntad utilizada para correr del hechizo de la selva. Ya en la cima de la pirámide más sagrada. Pensar. Pensar. Pensar

aereopuertos

guanatos, raves, una insinuación, traición familiar

horas hablando con lo que llamé Dios. Toda la gente que he conocido en mi vida en una noche. la
Quinta avenida.

Escenarios. Yaicet cantaba, yo en la guitarra. La gente coreaba. Qué se creían.

Adamu

La espalda y el cabello de lily, en el asiento delantero del coche de su madre. Clases de guitarra. Ilusión sembrada.

Cuarto lleno de globos, FabiPin, voleyball globero

Burbujas no requeridas, váyanse

Encontrarme conmigo de viejo cada vez que voy al centro: tío Rodolfo

Street spirit en el salón de clases

Una persona girando con su mochila para que no se acercaran a pegarle los chicos montoneros que molestan a la gente

Esquina del barrio antiguo, luego de una pasarela en el esquizo por la que no teníamos interés.
Abrazados.

Verguenza en el salón de clases de 6to año, todos riendo.

Una sábana, una regla, una mentira.

Locura, Boda, esposa, cordura, exesposa.

tortas con nicotina

Guerra de nieve en la prepa

Embarazo fingido

marca en el hombro. Hay que esconder la marca en el hombro.

Lily y yo tenemos una casa en una cochera del obispado

Monólogo sobre la persona que dinamitó las antenas de televisión

Llegada al último día de clase en el centro de idiomas. Yaicet con su nuevo novio. Un día después de cortarme. Dos días después de nuestro segundo aniversario.

Un primer beso interrumpiendo un poema prestado bajo una parada de camión por donde no
pasaban camiones. Continuación bajo un árbol conocido/una propuesta/aceptación. Demente el presidente.

Paul Mcartney en el palacio de los deportes y una pelea en All my loving

Pésimos Reencuentros con viejos amigos de temprana infancia

Beatriz y una Segunda traición

Julieta venegas, eli guerra, y santa sabina, con lily, después de un café improvisado en el tapanco
del maldito café infinito

El peor año nuevo de mi vida en matehuala

piojos

Otro año nuevo con día/ríe/nada/nadie en la cima de todo, cantando canciones bobas

A la cárcel con todo y manifestantes en cancún

Airbag, el día que mi vida cambió

Sesión de improvisación en suite de cadereyta después de ver a Lily con Daniel en el concierto de despedida de nerv al que me atreví a ir

Juego de ajedrez con un poeta gringo high

Mensajitos de texto desde un rave al que no debí asistir en guadalajara

Cómo le quebré un brazo a mauricio en la primaria

Correr

Revistas porno escondidas en un agujero de la plaza

El rostro de mi padre cuando descubrió que yo fumaba mariguana

Una llamada telefónica con antiguos reproches y un ‘por favor, olvidemos todo esto… te amo’ entre los dientes. Desesperación, mucha desesperación.

el profesor gerardo y un servidor cenando y platicando

diana 1 diana 2 y diana 3, contra mí en distintas partes del tiempo

bautizmo por los muertos

alucinógena noche en real de 14 con nevulador, en la que una confesión estúpida e irracional se hizo

pamela, muchos borrones

arena, luna, ovnis, olas, muchas olas

un chocolate caliente y un cuernito con nutella si'l vous plait

el olor del limpiador de piso en el café

festival de jazz latino en la playa

bárbara y los gustos encontrados, maldita seas bárbara.

recortes en una libreta

elegía para mi musa, en navidad

Fletcher y el encuentro más profundo con abismos negros que puede tener un hombre/live-evil de miles davis

Triste discusión sin motivo con carlos en el patio de los bullé/separación de nevulador

sr. triángulo

5 mujeres con novio, y yo que me quise morir

no puedo dormir si no estás junto a mí

balazos en la selva lancandona

el arruyo de mamá

elda

Pandora

conjunctivitis en el peor momento posible/adamu y yo cuidándonos mutuamente

írving juárez con su tabla hindú

améliè iniciando reproches eternos

representando a un tal Jaime en una historia de amor inconclusa en la pantalla que se concluyó
fuera de ésta

un bote de luz con la canción de yellow, e instrucciones de uso

campamento perdido en un desierto perdido

mandhala, bonita mandhala, mi vida mandhala

durazno frappé, rodolfo y yo jugando a actuar papeles que son tan nosotros como nosotros

adrián filmándo mi confesión

jaime, cecilia y luna

poema cursi en san valentín, un abrazo en la regadera

un papelito abierto. Todo precipitado en una copa verde oscuro.

Melita ebria confesándose

Kt’ y las distancias

encuentro imposible en la fila de un mcdonalds, horror. Aunque ambos sabíamos que ocurriría desde la mañana de ese día

hamaca, espalda hecha cuadritos en la mañana

sonrisa incompleta quitándose el brassiere con los dientes ante la imposibilidad de usar manos o pies.

paranoia. Dolorosa paranoia. Espantosa paranoia. ¿dónde estará?, ¿estará con él?, ¿qué es lo que hará?

una mejilla blanca y rosada

Bautizmo fingido en la playa

Cobá

Doña elda

Niños de cobá

Tarántula del mal, víctima

Una carta por cada día ausente

Gabrielle

Mi deseo de morder a Lily

Una cachetada en la prepa

Una cachetada en mi departamento

Un golpe mientras me bañaba

Rasguños y y golpes de yaicet

Una libreta con dibujos mojada

Mares de hormigas

Julieta o el vicio ampliamente recompenzado

Pies pegados, imposible despegarlos. (a menos que sea por llamadas al celular que provocan que ella se pare)

Una tarde de Sábado, padres en galerías monterrey, mariguana y sexo express

Iba a escribir un recuerdo aquí, no pude, es demasiado doloroso. demasiado… provoca que odie a
todo el mundo. No puedo borrarlo. No puedo. ¡Intento hacerlo!, ¡Intento olvidar y no puedo!

Carlos, Héctor y yo caminando en el desierto. Héctor cantando canciones de Tom Waits.

True love waits, apenas cantada por evitar el llanto. después de el mejor día de mi vida(llanto que salió por otros ojos –cómo te atreviste m.- )


El olor a abono mojado del campo de futball americano/ la lluvia a travez del casco/ los gritos inaudibles/los golpes

despertar entre las nubes

pedir raite en la carretera

saltar de la cascada

lily

lapintura

los días de la pinturallevarla en el carro mientras toma fotos

verla en mi ropa manchada de pintura

y… oh…

basta.

Esto

He encontrado la paranoia en mí una vez más(otra vez)
me importa más que nunca, duele(más que nunca)
desvalorizaba ese dolor calificándolo como chiflazón
años después me doy cuenta que la chiflazón es en realidad el sentimiento más propio, el esencial, yo.


‘mujer’ es una palabra muy pequeña y estúpida

Ella
Ella Ella
Ella Ella
es todo lo que conozco
todo lo que me importa, todo.
lo que valgo, lo poco que valgo lo consagro
a una tentativa imposible

Alucinación sobre un futuro impreciso

Vivíamos en el departamento del último piso de un edificio rojizo, en una ciudad que conocíamos tan poco como conocíamos nuestra palma de la mano. Extranjeros por cortos/largos 4 años, desesperados por completar nuestros estudios siempre inconclusos y viviendo juntos con las pocas posibilidades que nos procuraba el ser pintora y escritor.

(mi pintora, tu escritor)

Felices. Eufóricamente felices.

Un abrazo bastaba.
Un beso era la vida.
Y hacer el amor con consagrada profesión en los 47 mil lugares distintos (y en aumento) que habíamos encontrado en nuestro departamento de 7m x 7m era nuestro ritual más sagrado, en el que nos perdíamos invariablemente de la hora, día, condición, pasión y situación.

Una tarde de noviembre Tú meditabas como colibrí acostada en nuestra cama viendo las escasas gotas de lluvia estampándose en la ventana. Tarareabas una canción inconcientemente. Tus ojos brillaban opacos a la luz de un día nublado mientras yo escribía en nuestra pequeña sala(vivíamos en un cuarto grandote), divagando en ideas absurdamente reales, absurdamente absurdas.
Te levantaste. Abrazaste mi cabeza y recargaste la tuya en ella. El repiqueteo de la máquina de escribir cesó, el de la lluvia continuó, sonriendo cerré los ojos. Besaste mi frente y saliste. Arranqué la hoja con el texto que escribía y puse una nueva. Escribí que te habías ido, y nunca volviste. Que te esperé y te busqué por años. Que el mundo te había olvidado, que nunca exististe y yo te había perdido.
En eso llegaste. Compraste cigarrillos en la tabaquería de enfrente, tardaste 20 minutos. Por la forma en que te observaba al llegar te pusiste curiosa. Con ojos grandes dijiste ‘¿Qué?’.
Nos reducimos a uno en un parpadeo. Hicimos el amor por 5 días. (tan explosivos como un sol en pubertad). Llorando, riendo, gritando y viajando nos besamos hasta el alma, penetramos aun nuestra existencia más íntima para acabar con lo que quedaba de cuerdos en nosotros. Agotados, exhaustos, extenuados, fatigados, nos besamos lentamente tan lentos como el universo mismo moviéndose con la paciencia de un dios sin prisa y así nos amamos con la fuerza delicada que es propia en nosotros, nosotros y sólo nosotros.Y sólo nosotros.
Nosotros solos.
Nosotros.

Al final, los cigarrillos que trajiste matizaron con su humo la infinita paz de un día nublado en algún lugar de un

futuro perdido e impreciso.

Alucinación sobre un pasado que no sucedió

__Hace no tantos años en un internado de un país que no existe, ella y yo nos conocimos. Éramos unos niños, apenas de 8 o 9 años y las cosas no eran fáciles ni difíciles, porque estábamos locos. Claro, en ese tiempo no lo sabíamos. Nada sabíamos. Y no nos importaba no saberlo. Sólo seguíamos el constante e irresistible impulso de estar juntos.
__Cuando la vi por primera vez fue cuando llegué al internado, creo que ella también llegó ese día, no lo sé. Estábamos en las filas de comida separados por unos 200 metros y media hora de distancia, porque primero se formaban las niñas y después los niños. Creo que ni siquiera nos vimos. Eso hubiera ameritado un castigo por parte de alguna institutriz. Sólo sentimos que nuestro imán interno giraba precipitadamente en dirección del imán del otro con una fuerza de atracción que a veces sentíamos nos desmembraba, la misma fuerza que se mantendría para el resto de nuestra existencia juntos.
__No hablamos ese día, jamás en nuestros días nos dirigimos la palabra, pero los dos supimos qué hacer para abrirnos paso entre lo imposible y encontrarnos en la única ocasión del tiempo en que la vigilancia del internado lo permitía, la noche. El salón donde dormíamos era una gigantesca bodega que medía kilómetros de largo y ancho, en la cual no había espacio alguno sin catres, todos separados equidistantemente uno de otro. En un extremo dormíamos los niños, en el otro las niñas. Y a la mitad, impidiendo el contacto entre unos y otras, había decenas de filas de catres vacíos.
__Tarde más tarde, en ese primer día, a la hora sin hora. Rodé de mi catre callendo silenciosamente al suelo. No sabía dónde ella dormía ni dónde encontrarla. El instinto me guió. Me arrastré con sigilo durante horas y horas, por debajo de los catres. No sabía de fe, ni de esperanza, tampoco de felonía o desilusión, sólo seguía arrastrándome con los brazos en completa oscuridad. Hasta que llegué a las filas de catres vacíos a la mitad de la bodega y sentí que el imán me jalaba con tanta fuerza que perdía la realidad. Justo a la mitad nos encontramos, acercándonos a toda velocidad hacia el primer y único beso que tendría valor en una existencia. Ella también se había arrastrado. Llegamos a un punto de encuentro no acordado al mismo tiempo. Nos acariciamos rostro con rostro. Era lo único que nos permitía hacer el espacio que teníamos. No importaba, nada importaba, estábamos juntos. Pasamos tan solo un par de minutos ahí, que parecieron una eternidad, una eternidad que no fue suficiente. Volvimos arrastrándonos a nuestros respectivos catres al sonar el reloj que indicaba la proximidad del amanecer. Repetimos ese acto en todas nuestras noches.
__No era el único contacto que teníamos. En nuestras distintas actividades pasábamos por los mismo pasillos y nos dejábamos símbolos recocibles sólo a nuestros ojos. Una línea raspada en el suelo, o una marca hecha con el dedo en una ventana eran suficientes. No sabíamos leer ni escribir. Eso nunca nos limitó, todo lo contrario. Un punto hecho con carbón en el palo de escoba con la que barrería el patio era un poema, una marca de dedo en el jabón de baño era un soneto, un punto de una pared cualquiera contemplado en silencio era nuestra plática en común.
__Dos meses. Tan sólo dos meses compartimos un espacio y 60 noches. Luego vino la guerra de los 10,000 años y fuimos regresados a nuestros hogares. En dos lugares distintos de un universo en expansión perenne.
__Tras la separación seguimos en contacto por un tiempo, a veces llegaba un cuervo con un trébol en el pico, y sabía que era una carta de ella. A veces yo escogía el viento de un día frío, que sabía refrescaría sus mejillas llevándole mis sentimientos. Pero la guerra se agravó. Y crecimos. El contacto se perdió. No nos volveremos a ver.
__Aunque en contadas ocasiones, días de nada y silencio permitan que el imán se mueva ligera y casi imperceptiblemente, para que la cóngoja invada nuestros cuerpos.

Algo anda mal

Fue lo que le dije a la tarántula del mal. Y en efecto, algo anda mal.
Me di cuenta el sábado en la noche, cuando me quedé dormido (¿dormido?) mientras Melita hablaba sobre el concepto que se nos viene a la mente cuando vemos la imagen de una persona conocida en comparación con lo que sucede al ver la imagen propia en un espejo. No quería escuchar hablar a Melita sobre espejos, así que cerré los ojos y me fui. No me dormí, el caso fue más extraño. Me recordó a las meditaciones que hacía con Adamu pero esta vez fue de forma más profunda.
Vi una luz a travez de un túnel, y no era una luz maravillosa, más bien lo que se veía era una escena de la vida real que acontecía en algún lugar. Era un par de personas platicando una con otra. Podía sentir que me acercaba a ellos, que recorría el túnel aproximándome a la luz.
Uno mismo se puede dar cuenta de que la situación no es regular por las sensaciones. De la sensación que me provocaba el acontecimiento no tenía referencia alguna. Estaba en blanco. Eso me emocionó. Melita me sacó del trance. Ella estaba preocupada, pensó que fue un desmayo. Luego se fue porque cayó en cuenta de que no le pondría atención esa noche.
Urraca habló de espejos el jueves. Eso sí me gustó. También me enseñó sus tenis nuevos, que también me gustaron. Aunque no dije nada, no podía hablar, mi atención se descompuso desde que la vi mientras yo subía las escaleras. No hablaré más sobre ello, temo ensuciar el recuerdo en mis palabras.
Algo anda mal… lo sé. Algo anda muuuy mal.

Ayer llegó la noche. Juro que llegó.

fase dos(regresión)

me odio






y sigo teniendo miedo

fase cuatro

tengo miedo

fase dos

te odio

las 12 ya van a dar, el niño va a despertar

En el trabajo

__Me encerré en el baño por media hora para escuchar 'bitches brew'. Lo justifiqué diciendo que estaba vomitando una legión de almas que trataban de posecionarme. Media mentira. Las almas sí se posecionaron de mí, pero no las rechacé(?), les di albergue mientras desordenaban mi cerebro al compaz de la musique(pas automatique).
__Las puertas de los cubículos en los baños de aquí son grandiosas. Son azul eléctrico y uno se puede reflejar parcialmente en ellas. La imagen se parece a las pinturas de algunos impresionistas pero azul(eso me recuerda a Picasso), muy azul. Las sombras se distorsionan y dominan el cuerpo. Los ojos se pierden entre las cejas y éstas entre el cabello a los costados de la cara. La boca sólo es el labio inferior iluminado. Azul azul azul.

Cierro los ojos
Algo pasa

Cierro los ojos
Sigo viendo

Cierro los ojos
Siento que dejo mi cuerpo

arrugas en la frente

La fantasía de lo cotidiano puso señales muy claras en mi camino el día de hoy.
En la banqueta una pequeña planta crecía entre las grietas del pavimento, había sido aplastada en repetidas ocasiones, y seguía ahí, maltratada pero levantándose. Difícil que esa plantita cambie su lugar de residencia. No puede por ella misma mudarse a una maceta. Yo, preocupado, podría intentar sacarla de ese lugar y transportarla a un jardín, pero es ilegal romper el pavimento(¿y eso a mí qué?) y podría dañarla. Lo más posible es que se quede ahí, creciendo entre arena hecha piedra, siendo pisoteada por cualquier ciudadano decente o indecente que por ventura no mire al piso mientras camina hasta que sus fuerzas no le alcancen para levantarse o sea arrancada del mundo por un zapato arrastrado.
'¿hasta cuándo es suficiente?', le pregunté a la planta
no me respondió. en cambio fue pisada una vez más ahora por unas sandalias distraídas(si pusieran atención, ¿lo evitarían?) y una vez más se levantó imperceptiblemente más maltratada que antes.
Me levanté y me uní al río de personas(es curioso cómo sólo agachándote y quedándote inmóvil puedes evitar ser parte de ello), un señor con bastón me señaló y gritó imperativamente '¡Ayúdame!', no pude evitar asustarme o por lo menos sacarme de onda, luego acercó su mano derecha esperando que le diera dinero. No le dí. Lo evité y seguí caminando.
En fin. Hoy comí ensalada. Mientras estaba en la barra de ensalada llenando mi plato de queso cottage(el más indiferente de los quesos) un señor de bigote laaargo y cano con ojos tristes me miraba directamente. ¿por qué?, no sé. Pero el señor estaba parado al otro lado de la barra, no se servía, ni tenía plato. Me le quedé viendo y no desvió su vista. La situación no era agresiva, sólo nos estábamos mirando. Y así nos quedamos un rato, hasta que me llené de aderezo la mano y me distraje. Terminé de servirme y fui a sentarme a una mesa. El sr. continuó viéndome hasta que terminé de comer y salí del local.
Las señales me rodean y confunden. Mentí. No son claras. Ni siquiera son señales. Sólo cosas que me arrugan por dentro.
Olvidé mencionarlo. Hoy no tengo sentimientos.

ultraviolencia o cómo una emoción puede revertirse para dejar un incómodo espacio en el pecho

El único plan era sacarle los dientes, aunque mejores ideas podían surgir transcurso de la noche.
Éramos 5 contra uno. No está mal. Apenas lo vimos solo y corrimos contra él. Nos vio y trató de huir todo histérico. La persecusión fue corta, lo tacleamos y llevamos hasta el piso. Ahí sacamos los instrumentos. Pero antes utilizamos su estómago como trampolín, hasta uno de nosotros pudo lucirse con unas acrobacias, yo le aplaudí mucho, los demás también. Nos divertimos tanto que decidimos guardar los instrumentos para más tarde y mejor sacamos el sombrero. Guardamos a la víctima en éste y nos lo llevamos a la guarida. No quiero ni contar lo que hicimos ahí.

No, no lo quiero contar y no lo haré.

Soy ilegal, indebido, no reconocido, ilícito, etc.
¿malo, feo, sucio, maloliente?

sí, mucho

sucede que hoy me siento tan poco... especial

Cómo detener una bala de cañón con los dientes. Pt 1.

escena 1. La conferencia de prensa.
-¡Sr. Fabulástico, Sr. Fabulástico!- Repetían con insistencia decenas de voces disonantes.
-Tú, el joven de los lentes de aviador.
-Gracias Sr. Fabulástico. Roger de XNN. Lo que todo el mundo se pregunta Sr. es, pues, ¿en qué diablos está usted pensando al salir de su retiro y creer que puede parar una bala de cañón con los dientes?
-Jajaja, eres un buen chico, Jhonny
-Roger
-Jajaja, saben chicos, aunque no lo crean yo mismo me hice esa pregunta, sí que me la hice, jajaja, pero luego pensé: heeeey, yo derroté a los más grandes enemigos del pueblo en mis buenos tiempos, ellos eran grandes y fuertes, no como ustedes, los chicos de ahora, jajaja, y saben qué ¡estos son mis buenos tiempos también!, y un montón de chicuelos como ustedes que nunca me vieron en acción, vamos, en ese entonces ni siquiera se había fabricado el condón defectuoso que los causó, no tienen el derecho de cuestionar la última acción heróica de mi vida, jajaja, ¿alguna otra pregunta, chicos?
Decenas de voces llaman al héroe.
-Tú, la señorita de los dientes chuecos.
-Sí, Sr. Fabulástico, Diana de Radio que Radio. Mi pregunta es... ¿Está usted loco?
-Jajaj...- Fabulástico detiene su risa y lanza colérico su enorme cuerpo sobre los periodistas, decenas de gritos se escuchan hasta las afueras de la sala de prensa.

escena 2. Fabulástico platica con su entrenador.
El Sr. Fabulástico, está solo, sentado en una banca de madera en los vestidores de su gimnasio privado. Tiene como siempre su antifaz verde puesto. Se encuentra extenuado después de un fatigoso día de ejercicios. Trae sus pantalones de defensor de la justicia, y una toalla doblada calléndole sobre los hombros. Parece mirar el suelo, sus enormes brazos descanzan en sus piernas.
-No lo sé, Pá, ya no es como antes, la gente de ahora, ellos..., no tienen fe. No creen en nada, Pá. ¿dónde está su espíritu de lucha y justicia?
Fabulástico tiene frente a él una fotografía de él mismo, por lo menos 30 años más jóven a lado de un diminuto viejito, moreno, bigotón, delgado y garrudo. Éste porta una camisa que dice 'coach'. El entrenador tiene la mano izquierda en el hombro de Fabulástico, y con la derecha descanza en su hombro la misma toalla que el héroe lleva ahora en su espalda.
-Extraño los viejos tiempos, Pá- continúa nuestro héroe -cuando los niños se acercaban a mí, a que firmara sus tarjetas con mi foto, ¡Sí que me admiraban! jajaja. ¡Hmph!, pero tú me conoces, Pá, no soy alguien que viva en el pasado, ¡Por eso, síii, por eso es mi deber mostrarles!- diciendo esto fabulástico levanta y saca el pecho, mira hacia arriba y apunta con su mano derecha al cielo- ¡Demostrarles a todos esos vagos, que los héroes existen, que la esperanza prevalece, que YO, El Sr. Fabulástico prevalesco!- en esto se sube a la banca donde estaba sentado- ¡Y lo haré como es mi estilo!, ¡Jajaja!, ¡Mostrando que no existe imposible, Yo, El Sr. Fabulástico, devolveré la fe al mundo! ¡Jajaja!
El castigo del crimen salta de su banquita, y corre hacia las afueras del vestidor, con el aire orgulloso con el que la gente siempre lo ha visto, la toalla ondulando en el aire cual magna capa.

(cont...)

El misterio de los columpios

Cuando la vi frente a mí no pude dejar de correr hacia ella. Corrí con todas mis fuerzas, y ella hacia adelante y a hacia atrás, adelante, atrás, adelante, atrás y ¡Bump! adelante deteniendo mi carrera y tumbándome a la tierra.
Abrí lo ojos y el rostro de ella estaba en el cielo, en el fondo unas tres nubes blancas. Se veía encantadoramente mortificada.
- ¡Aaay!, ¿No estás muerto verdad, verdad?, ¿Verdad que no estás muerto? ¡No, no!- dijo aceleradamente respirando muy rápido.
No sabía si estaba muerto, pero igual moví la cabeza negándolo. Todavía se escuchaba el chirrido del columpio meciéndose solo.
- ¡No te vi!, perdón- enchuecó la boca y medio levantó las cejas, una más que la otra.
Me incorporé con torpeza.
Ella trató de ayudarme, pero no me tocó, movía mucho las manos creo que no sabía qué hacer.
Sacudí el polvo de mis piernas más por reflejo que por necesidad. Veía sus manos que habían cesado de moverse y ahora estaban juntas apretándose con rudeza. No me atrevía a subir la mirada y enfrentarme con la suya, estaba
nervioso y frío, pero lentamente lo hice, sentía la necesidad de hacerlo. Cerré los ojos y levante la vista, todavía pasó un segundo antes de atreverme a abrirlos.
Y ahí estaba, su rostro pequeño y redondo. Me miraba fijamente. Como nunca nadie lo había hecho. Tenía esos ojos enormes cafés medio difuminados, que yo guardaría por siempre en un lugar escondido, sus labios diminutos se movían lentamente entre abiertos y cerrados.
- Tienes un ojo morado- lo señaló sin separar su brazo de sí misma ni dejar de mirarme.
No sé qué cara tenía yo en ese momento, seguro era una muy extraña, porque no la sentía. No sentía mi cuerpo. Me precipitaba hacia ella como sucedió cuando la vi por primera vez.
- Ya... ya tengo que irme- al decir esto giró rápidamente y corrió, salió del parque y se perdió entre las casas.
Cuando la perdí de vista caí de nuevo al suelo. El cielo era más oscuro que hace un rato, anochecía. También yo tenía que volver a la casa. Pero no podía irme, el columpio seguía chirriando y chirriando sin ella, sentía que jamás se detendría.

orrágic

Lidia volvió al punto de encuentro. Había cenizas y humo. Respiró todo el humo que pudo y esparció las cenizas por su cuerpo. Aguantando la respiración corrió hasta un lugar de sus sueños. Ahí, sola y segura, guardó todo el humo en un globo, extendió las cenizas en un manto blanco.
El trabajo fue arduo. Lidia dio su fuego para unir las cenizas y el humo. Con sus largas manos habituadas al barro y los colores trabajó por eones dándole forma a algo acabado. Nunca se apartó en pensamiento, sólo era ella y su obra.
A veces lloraba. Con sus lágrimas hizo los ojos.
A veces reía. Con su risa delineó el rostro.
Pasaba sus manos apenas rosando la estatua, con su aliento la acariciaba pacientemente, usaba su lengua para dibujarle el símbolo de ella en todo el cuerpo.
Lidia llamó a su obra, lo nombró Herida, murió para darle vida y desapareció con el viento del tiempo.
Cuando Herida abrió los ojos, se sintió incompleto. Buscó en su corazón y encontró un recuerdo, encontró la falta de Lidia y supo lo que había pasado.
Herida no soportaba la existencia. La falta en su corazón era demasiado grande. Deseaba a Lidia con tanta fuerza que el fuego se encendió en él y se consumía lentamente.
Terminó de consumirse con dolor y un deseo imposible. Devolvió el aliento al viento. Lidia recobró la vida, esperanzada volvió al punto de encuentro. Había cenizas y humo. Respiró todo el humo que pudo, esparció las cenizas por su cuerpo.

el sueño de los nuncas y el infierno

'ella nunca volteó hacia atrás'

Floto. No debería de hacerlo. No ahora. Aterrizemos.



'ella volteó atrás, se bajó de nuestra espalda y caminó de vuelta a su vida, nos dejó solos'

Sí, así está siendo. Así será. Arrepentidos para siempre.



'mientras camina de vuelta a su vida, la seguimos con la mirada, no podemos ver a otro lado, no podemos...'

Duele pero es así.



'nos abrazó, recargo su rostro en nosotros y cerró los ojos...'

Depierto
el espejo roto
mi mano sangrando




'tú, yo y solamente...'

Depierto
el espejo roto
mi mano sangrando



'aceptará, se irá con nosotros, nos abandonaremos juntos'

Depierto roto
el espejo sangrando



¿cuántas veces tengo que despertar?
¿cuánto tiempo seguiré así?
¿cuánto más?

All Blues(II)

Ayer noche tuve una plática muy interesante con mi amiga imaginaria. Me preguntó qué es lo que está sucediendo, por qué he cambiado tanto en unas semanas, por qué no puedo dejar de escribir.
Callé. Sus preguntas siempre me hacen pensar por horas. Al final no respondí, miramos a puntos distintos y nos levantamos para regar las plantitas.
Más tarde comencé a leer 'Momo' otra vez. No me gusta identificar gente con los personajes de los libros, mucho menos identificarme, pero me permití hacerlo, porque ahí encontré parte de las las respuestas para mi amiga imaginaria.
He decidido regalar ese libro.

arriba abajo

corro por las escaleras
sexto piso
decimooctavo piso
trigesimosegundo piso
hasta el octagesimocuarto
corro por los pasillos abriendo las puertas
la respiración falla, hay sudor, cojeo
corro, abro más puertas
hasta llegar al closet del conserje
abro lentamente esa puerta
estás ahí con un hombre
los dos juegan a cuidar un pollito luminoso
tú levantas la vista para verme
acabado
tus ojos brillan
y no me miras
algo inmencionable me llena y corroe
soy vil
tomo dos escobas y cierro la puerta
dejándote tras ella
camino hacia la oficina del fondo del pasillo
está lejos
la puerta abierta
una enorme ventana
comienzo a correr
dos escobas en mano
sigo corriendo
cruzo la puerta de la oficina
lanzo las escobas hacia la ventana
sin dejar de correr
la ventana se rompe
las escobas caen
brinco sobre el escritorio hacia la ventana rota
caigo
el mundo es lento
alcanzo a las escobas en el aire
comienzo a girar
me voy

a veces quisiera... haber... no haber...

En un cubículo
Audífono/speaker puesto
Monitor
Teclado
Consola
Yo
Otro Yo

m. presenta: Las acciones del Otro Yo

1
remuevo los audífonos de Yo, lo paro de su asiento, le pongo el morral y lo guío hacia la salida
juntos corremos
- rewind<< -

2
Tomo el brazo derecho de Yo y golpeo el monitor hasta quebrarse. Le provoco cosquillas para que una risa estrepitosa salga de él. Lo acompaño en las consecuencias.
- rewind<< -

3
Yo está un poco mal. Lo cargo y lo llevo a casa. La gente no debería trabajar cuando está así.
- rewind<< -

4
Iba a sacarlo de aquí, pero él salió solo.
- rewind<< -

5
Yo se combustionó esponáneamente.
- rewind<< -

6
Yo no era Yo esta mañana. me pregunto qué le pasa.
- rewind<< -

7
Ella burló la seguridad del edificio y entró en él, llegó al segundo piso donde Yo está, le quitó los audífonos, lo besó antes de que pudiera decir palabra alguna, se acercó a su oído y le dijo 'tú, yo y solamente'. Luego Ella lo tomó de la mano y se lo llevó lejos, muy lejos. muuuuuuuuuuuuy lejos.
- rewind<< -

8
Me metí en Yo y salimos corriendo, directo a Ella. Así como estábamos. Cuando llegamos a Ella la cargamos en nuestra espalda y corrimos. Ella nunca volteó hacia atrás, nos abrazó, recargó su rostro en nosotros y cerró los ojos.
- rewind<< -

9
Yo en la oficina. Yo caminando por la calle viendo todo. Yo hincado limpiando el jazmín. Yo recordando que leyó algo que le rompió el corazón. Yo Tirado en el piso soyosando. Otro Yo Pateando a Yo para que se incorpore y siga adelante.
- rewind<< -

10
Yo es un caso perdido. Mejor lo dejo solo.
- eject -

ver la vida directo a la cara, para conocerla por lo que es, y quererla por lo que es, y después... apartarla...

"...siempre los años entre nosotros... siempre los años... siempre el amor... siempre las horas"

¿lo dijo Virgina Woolf?
sí, en su carta suicida.
¿Qué diría mi carta suicida?
nada
si decido destruirme, no habría carta
sino invitaciones

shake us out of the heavy deep sleep

Ayer hablé con algunos amigos. Ellos, como siempre, miraban hacia la muralla de ladrillos rojo hormiga(nunca me han mirado, no los he visto de frente) y luego me dijeron:

¡Qué!, no importa, no importa lo que dijeron

¿qué he hecho, qué he hecho?
mis manos cargando sus restos, mi cara cubierta de ello

¿qué he hecho, qué he hecho, qué he hecho, qué he hecho?

no me arrepiento
sí me arrepiento
no me arrepiento
sí me arrepiento

correré por las calles ondeando la bandera de mi signo. La gente me seguirá, más curiosa que emotiva. Los llevaré hasta la cima del monte más alto, frente a todos cantaré con voces -húmedas limpidas sordas- y la bandera crecerá hasta abarcar 1/3 del cielo. La gente lo verá extasiada pero comprenderán y empezarán a irse y los que no serán golpeados con la bandera al 8vo mes.

no
sí
no
sí

-¡Aháa!, ¿le cachaste?
-no pos sí
-¿y?
-no pos no
-¿eh?- llegó la me suelo cara.
-¿cómo te sientes?(no me importa cómo se sienta)
-bieeen(nunca me había sentido peor)... perdón
-ah...

all blues

es curioso
todo es curioso
y raro, muy raro
-demonios, iba a escribir algo importante aquí pero los 1000 mg de sedantes que me tomé comienzan a hacer efecto, es como estar a punto de presionar un botón y olvidar el por qué-
es cierto, nos volveremos locos


he encontrado la forma de resolver las cosas, por fin la encontré, necesito hacer grandes sacrificios, los más grandes que he hecho en lo que tengo de vida, pero los haré, ésta vez vale la pena

por lo pronto ya hice el primer sacrificio, es gracioso, una vez que lo hice, ya no parece un sacrificio

no puedo dejar de pensar en el momento del placer, en prolongar los últimos pasos antes de llegar al clímax, prolongarlo hasta no poder más, hasta que el cuerpo tiemble y no se pueda reprimir una sonrisa, la risa y lágrimas de alegría, mucha alegría. Disminuir la velocidad, hacerlo tan lento como unos dedos en forma de gotas de lluvia recorriendo el cuepo, cada poro y centrímetro sentido hasta que todo se convierta en deliciosa ansiedad, esa ansiedad indescriptible que nos llena y disfrutamos tanto, aunque nunca le podamos dar una explicación, esa que nos hace querer gritar y hacer fuerza en todo el cuerpo, encogerlo y estirarlo hasta sus límites

???

me gustan los símbolos de interrogación, parecen personas

me gustan los símbolos de interrogación más que la mayoría de las personas

no conozco a la mayoría de las personas

entre las personas que conozco, sólo me gusta un par

las disfruto como helados cada vez que pienso o estoy con esas personas

me gustaría abrazarlas y comérmelas

es lo malo de comer algo, luego de hacerlo, te quedas sin ese algo

en la foto de la credencial de elector debí haber salido de cabeza, luchando por no caerme

no estoy seguro. creo que en mi cuarto hay gente que sale de las paredes. asoman medio cuerpo mientras duermo. no me miran, yo no soy su objeto de atención

cicatrizo lento, no soy hemofílico, pero sí lento, en la calle me lleno de palomas, no me gustan las palomas, caminan como tontas. una vez en una plaza a un lado del teatro peón contreras tuve una reunión con un centenar de palomas, les pedí razones para no detestarlas, pero a ninguna paloma me pudo dar una, son tontas. luego llegó alguien con un sombrero bonito y perdí la atención

_______________¿?¿???¿

¡A-Atención! ____???????
¡Fiirmees! ______???????

¡YA!___________ ! ! ! ! ! ! !

Ventrílocua

Olvidé decirle a Paty que se asegurara de cerrar la puerta al salir. Con lo distraída que es esa niña seguramente la dejó abierta para que los vecinos entren y se roben las pilas del televisor otra vez, genial...


Mamá seguramente se está reprochando no haberme recordado cerrar la puerta, la muy ilusa no sabe que la dejo abierta a propósito para poder hecharle la culpa a los vecinos sobre la desaparición de las pilas del televisor que en realidad vendo para ahorrar y así poder comprarme los binoculares de aquel aparador. Ya deseo tenerlos en mis manos, para ver, ver y ver sin ser vista.
No basta poner palabras en los labios de las personas que me hablan de cerquita, estos siempre se dan cuenta de que no les pongo atención, ahora también voy a poder hacerlo estando bien lejos y sin que la gente espere una respuesta que compruebe que escucho sus palabras. Con los binoculares podré ir a la colina y desde ahí apuntar a las callejuelas del mercado, donde se dicen puras tonterías, para poder hacer declamar las palabras más bonitas hasta al más degenerado de los hombres. ¡Por fin será un mundo perfecto!, donde la sra. Berta en lugar de reclamarle al Sr. Chinchón la calidad de los tomates le dirá cantando una oda a sus bigotes de palitos, a lo cual el Sr. Chinchón, en lugar de correr a la Sra. Berta haciendo un berrinche, pues, bailará la danza de las frutas y verduras mientas la Sra. Berta sigue su parte en el ritual aderezando al danzante en jugo hecho de tomates lanzados preferentemente a su cara. Habrá mucha música y juegos, y podré participar en ello, por supuesto, cantando bailando y riendo en ese mundo mundo mundo.

900mg de paracetamol

red wine and sleeping pills help me get back to your arms?
ssip

tengo antenas

ayer llegué a la casa, después de recoger la bufanda que le hizo Melita a mi hermano

-por qué hace esas cosas que me obligan a no alejarme de ella-

mi hermano se largó a vancouver esta mañana y ahora sí me he quedado solo

-en septiembre 11, cuando a bush se le puede ocurrir organizar otro atentado terrorista para demostrar que la nación estadounidense es vulnerable y su régimen debe prevalecer para seguir velando por el mundo, voten por mí-

solo... está bien. a veces es demasiado. extrañaré las visitas nocturnas de mi hermano, siempre en el momento adecuado, cargando buen humor, buen gusto y/o una guitarra.
ahora nadie irá por mí cuando esté solo. a todos los he alejado.

-Cyril contemplando la pintura-

estuve muy triste por la enfermedad de la plantita de albahacar. afortunadamente llegó el mantis, me dijo que no me preocupara, que me fuera a dormir mientras él se encargaba de aliviarla. confié en él e hice como dijo. cuando desperté la plantita de albahacar había recobrado sus fuerzas y se veía muy reluciente.

-quiero ser un mantis médico de plantas-



hoy comienzo el drama.

Permanencia en una noche oscura y sin luna. ¿Hay fondo en esta caída?

Lo que no mencioné en el post anterior fueron los ensueños de esa noche. 5 veces soñé con lo ocurrido, cada vez más bizarro, catastrófico y ambiguo. En los 5 no podía decir palabra alguna por razones distintas, al menos en dos vestía de moño y lino.
Y hubo un sexto sueño que fue sobre el auto increíble: ‘Lo’ Michael’, brrrrom brrroom.

Y se escurrió el aire en su pintura tras decir ‘te amo’

Ayer 9/9 me encontraba enfermo y torturado por mi ambición de independencia y la necesidad que tengo de trabajar para pagármela. Empezó como un día horrible, no me atreví a bañarme, le tengo un espantoso temor a las frías gotas de agua que salen por la regadera en una fresca mañana. Una vez más me desnudé y pasé media hora en la ducha sin atreverme a abrir la llave, hasta decir ‘ya es suficiente, no te hagas’. Con éste van 4 días seguidos que no me baño por la misma razón el mismo tiempo que tenía sin probar alimento(hasta hoy). Total, con una gripa que exprimía mi cerebro y hacía gotear mi nariz a punto de deshidratación. Sin olvidar el dolor de muelas, dos muelas del juicio saliendo en el mismo lado de la dentadura, que no me permite abrir la boca lo suficiente para engullir alimento que no sea líquido, ni cerrarla para masticar el sólido más diminuto que pueda encontrar dentro de lo comestible; me atreví a ir 9 horas a un trabajo donde hablar es lo esencial y dada mi condición serían 9 horas de esencial tortura, sin posibilidad de conseguir alimento más decente que un Yogurt de fresa(yum).
Por fin la novena hora terminó y me dirigí a cumplir mi compromiso de asistir a la premier de Fahrenheit 9/11 auspiciada por un montón de activistas medio deschavetados que deseaban mi opinión respecto a los pasados atentados policíacos contra los manifestantes de la cumbre de Guadalajara, siendo yo un testigo ocular de la misma cumbre llevada a cabo en Cancún. Disfruté Fahrenheit como se puede disfrutar cualquier cosa hecha por el Sr. Moore. Ya para el final de la película la falta de energías y la sobra de dolor de muelas/oído/garganta/migraña y la combinación de eso con escenas fortísimas de personas sufriendo los estragos de una guerra lograron sacarme de quicio. Cuando los activistas se acercaron a hacerme preguntas que no estaba en posibilidad de responder llegó Mel(Melita) a rescatarme, adivinando por mi facha el mal que me aquejaba. No sé cómo hubiera podido llegar a la casa sin ella. Fue la única persona que me ayudó. Es difícil vivir esas situaciones sin tener una madre cerca para ver por uno. Llegamos a la casa, me llevó a la cama, fue de compras, me dio medicina, limonada, jugo de naranja y estuvo ahí hasta que me dormí, y después de eso.
Llegó la madrugada, las 3 o 4 de la mañana, y escuché cómo tocaron la puerta. Supuse que era mi hermano sin dinero para el taxi, después de un jueves de McMullens, ¡oh, qué error!, era la Srta. Aire/día/nada/arena acompañada de dos de sus amigas. Entraron a la casa pidiendo alojo, pero oh, sorpresa, Mel estaba ahí, prestándose a cuanta mala interpretación pudiera darse. La situación fue más que incómoda. A pesar que he detenido mis relaciones con esas dos mujeres, por mi período de castidad pre-drama futurama, ellas no sabían si la Otra que no conocían era mi amante actual. Cómo no pensar eso con la pinche fama que me cargo, chin.
Nada/aire/día/nadie se fue llorando, repitiendo esas dos palabras que odio pero en pasado imperfecto, sus dos amigas le siguieron consolándola y maldiciéndome en su curso. Mel se encerró en mi cuarto, y abrió la puerta horas después.
¿Yo?, no dije palabra alguna, no pude hacerlo. Mi situación molar no me lo permitió. Y los tres paracetamoles mantuvieron mi cabeza gacha, una mirada triste y desesperanzadora, y por qué no, me sacaron varias lágrimas internas que sólo se externaron fuera de tiempo, al llegar el amanecer cuando mi rostro ya no mostraba emoción alguna.


Datos curiosos:
-Mel aceptó estóica mi revelación. El monstruo puede amar, y no es a ninguna de las protagonistas de la noche.
-Rey/reyna/arena/día tiene novio desde hace 3 años, qué tierno.
-Amiga No. 1 volvió 20 minutos después por su sweter.
-Amiga No. 2 volvió 20 minutos después de amiga No. 1 para entregarme un libro que nadie/nada/aire/arena tenía.


Fue una larga noche de dolor polivalente.

cómo derribar una montaña -drama 2do-

pruebo la paleta no pruebo la paleta
el dolor es demasiado no hay dolor
mordí una manzana la manzana me venció
estoy nervioso no estoy nervioso
la ansiedad me está matando la ansiedad no existe
el teléfono me mira el teléfono me habla
me arrastro para alcanzar me quedo inmóvil
yo sé que me están mirando yo sé que nadie me mira
la manzana estaba buena era una manzana podrida
mis piernas están temblando no tengo miedo
la locura y yo somos amigos no tengo miedo
siento que lo he perdido todo no tengo miedo

(pintura de Klimt como título, por favor)

Yo Araña caminaba triunfante entre las sábanas blancas de mí mismo. Levantaba mis patitas elegantemente a cada paso. Por fin mi objetivo se había cumplido, encontrarme conmigo en otra reencarnación, ¡já, nada más increible!. Las coincidencias eran tan grandes que sabía lograría mi cometido. Al principio, cuando todavía no emprendía mi camino y me enteré de que existía la posibilidad de lograrlo me desilusioné, parecía imposible para una araña recorrer tanta distancia y llegar a un lugar determinado en un momento determinado, pero aun así comencé el camino. A cada paso que daba el abismo entre Yo Araña y Yo Hombre crecía y crecía, las dificultades aumentaban, pero las coincidencias me hablaban de un destino, eso me fortalecía para seguir adelante, no podía ser casualidad que me haya tocado reencarnar en araña conservando mis recuerdos de vidas anteriores, aquí, presisamente aquí donde pasé alguna vez siendo hombre ¡Y en este tiempo, la misma época!, já, eso no sucede, pero sucedió, ¿cómo no tener como objetivo de vida llegar hasta el punto donde coincidiríamos por un breve instante Yo Hombre y Yo? ¡Y ahí estaba!, quién me viera, hubo muchos momentos en que no creí que llegaría tan lejos.
A pesar de recordar vidas anteriores la cabeza de araña funciona muy diferente a la de un hombre. Recordaba todo como si lo viera con 23 ojos y como si lo sintiera con mis 9 sentidos de araña entre los cuales no se encuentra el oído, por eso no comprendía muchas cosas que viví como hombre(y otros tipos de seres). Y no recordaba exactamente las razones que me llevaron siendo hombre a ese presiso lugar.
Continuaba caminando entre las sábanas para llegar al rostro de Yo Hombre dormido, cuando una sombra cubrió la luz de la ventana que iluminaba el cuarto. Era un búho, temí por mi vida aunque soy una araña pequeña difícilmente un manjar para un búho tan grande, pero la ventanta estaba abierta y el búho con ojos infinitos parecía observarme directamente y seguir todos mis movimientos. Noté algo extraño, no debía temer porque ese búho no era uno cualquiera, era Yo Búho, el que sería en alguna vida consecuente, y Yo Búho había llegado a ese lugar quizá con la misma intención, encontrarme con Yo Hombre y Yo Araña. Detuve mi camino para saludarme, el diálogo entre búhos y arañas es fascinante, aunque rara vez sucede. Los búhos miran con ojos profundos e infinitos que son uno solo, y las arañas con sus múltiples ojos, que son muchos puntos de vista. Yo Búho recordaba cómo había sido ser Yo Araña y Yo Araña me preguntaba lo que sería ser Yo Búho. Dicen que los búhos tienen la conciencia clara y larga, aunque no tienen tantos sentidos como la araña ni la poesía de ser éstas, su aire lo compensa, éste lo dice todo, están por encima, no sé de qué están por encima pero lo están. Nos deleitamos con una plática tan extravagante que nos olvidamos por un momento de Yo Hombre.
Déjenme decirles algo, cuando uno se encuentra con sí mismo no se necesitan muchas palabras, poco a poco las conciencias afines se comunican entre sí, no con palabras ni pensamientos, sino con una sensación de Paz indescriptible. Que Yo Búho y Yo Araña comenzamos a sentir desde... ¡Yo Girasol!
Si Yo siendo araña y búho pude llegar hasta ese lugar, por qué no Yo Girasol. El caso era aún más impresionante, cómo pudo un girasol llegar hasta ese punto, siendo lo que es, sin poder moverse. Es el misterio de las flores y los árboles, tienen formas de hacer las cosas que ningún otro ser comprendería. En su inmovilidad de ensueño se mezclan con la realidad para jugar con ella desde puntos insospechados. Yo Buhó estaba sorprendido, al parecer él todavía no había sido Yo Girasol, que nos sonreía a su manera desde una linda maceta de barro al pie de la cama, saludándonos tranquilo con el movimiento de sus hojas al viento y sus pétalos amarillos.
Yo Girasol giraba en su flor, y me hizo sentir el propósito de la reunión(haciéndoselo sentir a sí mismo). Un instante.
En el que Yo sería más que nunca, siendo 5 en uno solo.
¿5?
Sí, Yo Hombre seguía dormido, nunca hubiese comprendido siendo hombre. En cambio Yo-Mujer, en la misma cama que Yo-Hombre, se contemplaba, sentada abrazando sus piernas desde su reunión personal con Yo-Hombre. Comprendiéndolo todo. Comprendiéndose en la inocencia del hombre, la belleza del girasol, la profundidad del búho y las pasiones de la araña.

pensé en llamar por teléfono (tuu tuut)

pero preferí escribir un drama EL drama que definirá mi comportamiento para los siguientes 42 años de vida que me quedan(si es que no me los gasto antes). No lo he terminado, interrumpí mi cometido para hacer una lista de las cosas que odio, ya voy en la No. 2119 y no he pasado de escribir lo mismo que puse en la no. 1. Me cansé rápido de repetir las mismas letras, qué falta de creatividad la mía, ¡por zeus! Lo mismo digo para cualquier texto, todos están hechos con las mismas 26 letras ya conocidas que terminan por aburrirme. Aunque sus combinaciónes sean infinitas mi vocabulario no lo es. Aunque escriba en esperanto(como yo), no bastaría. Aprenderé chino y ruso algún día. En Moscú llenaré una bañera con agua, hielitos y signos rusos. En china haré pirámides humanas con chinos dispuestos a llegar al cielo, los símbolos chinos me servirán para aventárselos y tratar de tirarlos cuando sean tantos chinos en la columna que no puedan moverse. No se puede chegar al cielo apoyándose en otros, que les quede muy claro. Es más, quién quiere llegar al cielo. Yo no, no quiero llegar a lado alguno, eso no lo decidí sino que lo siento. Tal como todas todas mis no-decisiones, es lo que siento y ya, y así ha sido toda mi vida. ¿Qué sucedería si cometiera una locura a estas alturas? Ya van dos veces que alguien me dice, aléjate que le haces daño a la gente, en diferentes ocasiones y con diferentes personas. ¡Y A ellos qué chingados les importa! Que no ven que despierto juntando las tripas que salieron de mí en los sueños, no, no lo ven, y eso tampoco les debería de importar.
Siento demasiada energía a pesar de estar enfermo. Necesito salir corriendo hacia algún lado ¿hacia dónde iría?, porque sí me importa. Hacia el Este iría, creo. Con todas mis fuerzas a ver si rompo algo de realidad y me escapo de ella. No, este mundo no es para mí, no lo soporto, hay demasiado polvo, demasiado sol, demasiada gente, olores, demasiadas voces y vellos, órganos y más voces y olores, y gente y pensamientos y tanto que saber y tantas cosas que importan y no importan, y mugre y sangre y otros líquidos que manchan y los cuerpos y las plumas, y éste cuerpo feo, porque todo es feo todo todo todo, y él habla, ella también y todos y nadie para, y yo no entiendo porque no entiendo por qué debe haber palabras y lenguaje, es tan antinatural, al decir una palabra siento que he dejado de decir demasiado, y ya estoy llorando, pinche marica, comete locuras comételas, que nada importa, nada realmente importa, ni tú JA ni lo que sientes, hazlo atrévete, porque si no lo haces pues no lo hiciste y ya no sé que demonios harás, y ya te vas a ir ¿por qué te vas a ir? ¿por qué me voy a ir?, para escapar de ti helena la ballena, que no tengo idea si estás leyendo esto, para escapar de mis otros demonios, diez mil de ellos, que me los encuentro en la calle y cuando no me los encuentro, me los imagino y me hacen correr, esconderme y gritar mucho, sobre todo a los espejos que me miran y no reconozco al que me mira, me es tan ajeno, yo soy otra cosa lo sé lo sé, soy ese que delinea los árboles sus hojas y colores con palabras sin letras, y luego se imagina lo que siente el árbol y le lee en su mente el poema más bonito que conoce, sí soy ese, el que persigue a los gatos por las calles para que lo lleven a sus escondites donde hacen juntas secretas de gatos, el que platica con L cuando ella no está porque la sueño, me despierto y no me doy cuenta que he dejado de soñar, y muchas cosas más muchas, porque eso soy, no nada pero no todo, ni algo, lo más cercano es algos, aunque no me guste esa palabra, no me gustan las palabras ¿ya lo dije?, ni hablar... Uno debería poder cerrar los ojos y entrar a un mundo donde no esté la gente sino sus... almas y podamos deshacernos de las necesidades, los olores, el sudor, la saliva y la piel y jugar jugar mucho, sin palabras, con sentimientos y sensaciones y colores y sonidos.
Alucino, siempre alucino, bueno antes no, desde que tengo migraña sucede, pero ya no siento el dolor de cabeza porque se convierte en una presión que sale disparada en alucinaciones. No quiero comer no quiero dormir, aunque me duermo automáticamente cada vez que cierro los ojos, sospecho de inicios de narcolepsia, pero más extraña porque los sueños se están mezclando con la realidad.
Mi dieta básica son manzanas verdes, nunca rojas, odio las manzanas rojas. Cada vez que puedo voy a la tienda a comprarme una manzana verde, con ellas siento que no he comido, me mantengo ligero, quizá por eso me estoy enfermando de algo extraño, es como un resfriado pero no, estornudo y siento la cabeza pesada y los ojos raros. pero tampoco. creo que es... que necesito algo que es imposible tener.
Ahora me siento débil, ¿dónde está la energía de hace un rato?, se fue con la tristeza momentanea, que más bien fue rabia. Por eso no me gusto, por la rabia, me siento sucio e indigno, ¿indigno de qué? yo lo sé, pero no lo diré, porque quizá haya otros ojos aquí, que no nos han invadido como dicen ellos, porque el propósito original de cada una de las palabras que han sido escritas en este blog, inclusive las que fueron escritas antes de conocerla es que particularmente esos ojos las leyeran. Si no fuera así no valdría la pena escribir, no hay justificación para tal cosa. Podría escribir una odisea de 80000 palabras que la leyera medio mundo, pero si dentro del otro medio mundo que no la leyó están esos ojos mejor hubiera sido no escribirla. espero que no nos malinterpreten esos ojos, hay otros medios de escape desconocidos que jamás serán mencionados en su presencia(de ahí saqué el contenido de un papelito), porque son todavía más frágiles y delicados y son para mí, solamente para mí, no están hechos con palabras, ni colores, ni sonidos, están hechos conmigo, con algo que no se puede mostrar, aunque quisiera. quisiera quiesiera, ¿qué quisiera?, cometer una locura y dejar de hablar dos años(maditos dos años). no importa porque en el siguiente parpadeo esto no va a ser así, no será de forma alguna conocida, yo no tengo primavera, verano otoño ni invierno sino inefables estaciones que cambian momento a momento y matizan diferente a lo que dirige mis sentidos. (hacia ti, siempre hacia ti)
ya no me importa, o me importa mucho más que antes

-todo se ha precipitado sin control en una copa verde oscuro-

pero sigo escribiendo, ¡por zeus! sigolo haciendo, no podré detenerme nunca.
porque tengo tanto qué decir(y no quiero que alguién más que una niña chiflada de lentes y pelo chistoso me escuche), y voy a contar un cuento eterno
no pararé
no sr., no lo haré

érase que se era lo que no era ni es
veinte cuervos peregrinos con una urraca al revés
brincaban por una calle sobre charcos vagabundos
casitas formadas de hongos, colibríes meditabundos...

y así, cada verso crece y crece, se vacía a la nada a la que me dono
algún día saldrá de mí todo y con ese todo caeré con mis palabras en la nada.